El dolor de cabeza cervicogénico se define como un dolor de cabeza causado por un trastorno de la columna cervical. Se estima que este tipo de dolor de cabeza representa hasta el 20% de los casos de dolor de cabeza. Las características principales de la cefalea cervicogénica generalmente incluyen dolor de cabeza unilateral (solo en un lado), rango de movimiento limitado del cuello, y se desencadena por varios movimientos torpes o sostenidos del cuello. Los dolores de cabeza cervicogénicos a menudo responden bien a la atención quiropráctica, pero ¿cuáles terapias del conjunto de herramientas que tiene el quiropráctico provee el mayor beneficio para el paciente?
Una de las principales formas de tratamientos utilizados por los médicos quiroprácticos es la terapia de manipulación espinal. Este tratamiento se caracteriza por un empuje rápido, de alta velocidad y baja amplitud, que usualmente resulta en un crujido o chasquido que a menudo se asocia con la atención quiropráctica. Otro tratamiento común es la terapia de movilización, que consiste en técnicas lentas, rítmicas, y oscilantes. La investigación respalda ambos métodos para controlar los dolores de cabeza cervicogénicos con la decisión de usar uno sobre el otro según la preferencia del paciente y del proveedor.
Los médicos quiroprácticos también pueden utilizar la acupuntura y la punción seca en el tratamiento de los dolores de cabeza cervicogénicos. Una revisión sistemática en el 2022 y varias revisiones Cochrane informaron que la acupuntura proporciona reducciones significativas en la frecuencia de la migraña y de la cefalea tensional, así como del dolor de cuello y el dolor por osteoartritis. La punción seca es similar a la acupuntura al usar el mismo tipo de agujas, pero se aplican directamente a los músculos tensos en lugar de los puntos específicos de acupuntura.
Un estudio del 2021 comparó cuatro semanas de punción seca (más la estimulación eléctrica) y de manipulación espinal con cuatro semanas de movilización y ejercicio en pacientes con dolor de cabeza cervicogénico. Una revisión de las evaluaciones realizadas al comienzo de la atención, al final de la atención, y tres meses después del tratamiento final mostró que los pacientes del primer grupo (que incluía la manipulación espinal) experimentaron mayores mejoras en la intensidad, frecuencia, duración, y la discapacidad del dolor de cabeza. Los pacientes de este grupo también tenían cinco veces más probabilidad de seguir satisfechos tres meses después del tratamiento (77% vs 15%) y tres veces más probabilidad de dejar de tomar medicamentos para el dolor (66% vs 21%). Anteriormente, un ensayo controlado aleatorio encontró que de seis a ocho sesiones de manipulación cervical superior y torácica superior eran superiores a la movilización y al ejercicio en los pacientes con dolores de cabeza cervicogénicos.
Si bien a menudo discutimos las condiciones musculoesqueléticas en términos generales, cada paciente es único y no existe un enfoque que funcione para todos. Después de un examen completo y una revisión del historial del paciente, un médico quiropráctico decidirá un enfoque de tratamiento inicial y evaluará el progreso del paciente después de varios tratamientos y hará los ajustes necesarios.
