Si bien es difícil evitar que alguien choque su automóvil contra el tuyo, hay algunas cosas que puedes hacer para minimizar el riesgo de sufrir una lesión por latigazo cervical grave si ocurre una colisión.
La primera medida preventiva es asegurarse de que su asiento esté en posición vertical y que el reposacabezas toque la parte superior de su cabeza. Si hay mucha distancia entre su cabeza y el apoyacabeza, será de poca ayuda en caso de colisión. Además, si el reposacabezas es demasiado bajo, puede actuar como punto de apoyo, haciendo que el cuello se coloque en una posición peor, aumentando el riesgo de lesiones.
Otra cosa que puedes hacer para minimizar el riesgo de lesiones es estar en la mejor forma posible si ocurriera un choque. Las investigaciones han demostrado que las personas con buena condición física aeróbica parecen ser más resistentes después de los incidentes de latigazo cervical.
Si sabes que estás a punto de recibir un golpe, probablemente sea mejor permanecer en una posición neutral con los ojos mirando hacia adelante. Las personas con la cabeza girada antes del impacto parecen sufrir peores lesiones en los ligamentos.
Si puedes pagarlo, un automóvil más grande reducirá el impulso de tu vehículo después de sufrir una colisión. Ahora hay vehículos con asientos con protección contra latigazo cervical (por ejemplo, Saab) que amortiguan los efectos de los accidentes traseros. Las colisiones frontales tienden a ser menos severas para el cuello si las velocidades son iguales porque el mentón puede golpear el pecho impidiendo el movimiento hacia adelante del cuello. Las colisiones traseras y laterales no tienen este beneficio.
Desafortunadamente, existen muchos factores de riesgo inevitables. Las mujeres y los niños parecen ser más vulnerables, posiblemente debido al aumento de la relación entre el tamaño de la cabeza y el cuello. Además, si alguna vez ha tenido un trauma en la cabeza o el cuello y/o si tiene degeneración discal en el cuello, estos factores elevan su riesgo de sufrir una lesión más pronunciada. Otros factores que pueden retrasar su recuperación incluyen el uso de collarines, reposo prolongado en cama o tratamientos de tracción vertical. Inhibir los movimientos puede sentirse bien al principio, pero no es bueno a largo plazo porque puede resultar en una disminución de la función muscular y de la fuerza en la región cervical.
Recibir un diagnóstico lo antes posible puede determinar el mejor curso de acción para que tenga una recuperación rápida. Dejar pasar las cosas rara vez es una buena solución.
