Cuando de tratar a pacientes con dolor lumbar crónico se trata, los médicos quiroprácticos suelen utilizar un enfoque multimodal que implica terapias manuales, como la manipulación y movilización de la columna, combinadas con ejercicios supervisados y/o hechos en casa. ¿Por qué de esta manera?
En muchos casos, los músculos paraespinales superficiales de los pacientes con dolor de espalda se contraerán, como un reflejo, en un esfuerzo por restringir el movimiento y proteger el área de una lesión mayor. Desafortunadamente, tal restricción puede resultar en patrones de movimiento alterados que aumentan el riesgo de más lesiones (y dolor) en otras partes de la espalda baja (o incluso, en otras áreas del cuerpo). Pero sobre todo, debido a que los músculos superficiales de la espalda han asumido anormalmente el trabajo de mantener la postura, los músculos profundos de la espalda pueden perder su condición física y debilitarse, lo que solo aumenta el riesgo de contraer más problemas de espalda.
Entonces, cuando se trata de dolor de espalda crónico, el trabajo de un quiropráctico es doble: Restaurar el movimiento articular adecuado para "apagar" el reflejo anormal del espasmo muscular y fortalecer los músculos profundos para que los músculos superficiales puedan volver a su función normal.
En un estudio de 2011, los investigadores asignaron aleatoriamente a 301 pacientes con dolor lumbar crónico (adultos sobre los 65 años de edad, con una historia de cinco o más años de dolor lumbar crónico) a uno de tres grupos de tratamiento: Terapia de ejercicios supervisada; terapia de manipulación espinal (TME) o ejercicio y asesoramiento en el hogar.
Los investigadores monitorearon el progreso de cada participante durante más de un año y encontraron que los miembros de cada grupo lograron mejoras similares a corto y largo plazo con respecto al dolor, la discapacidad, la mejora global, el estado de salud general y el uso de medicamentos. Aunque los pacientes del grupo de la terapia de ejercicios supervisada experimentaron mayores beneficios con respecto a la fuerza, resistencia y rango de movimiento de los músculos del tronco en comparación con el grupo de ejercicios en el hogar, la diferencia en los resultados es comprensible, ya que el protocolo de la terapia de ejercicios supervisada fue mucho más intensivo.
Aunque este estudio no analizó específicamente el efecto de combinar ejercicio y manipulación espinal para el tratamiento del dolor lumbar crónico, varias pautas que han analizado la evidencia disponible recomiendan el uso de un enfoque múltiple para este grupo de pacientes. Por ejemplo, en 2018, la Canadian Chiropractic Guideline Initiative escribió: "Un enfoque multimodal que incluya TME, otras intervenciones activas de uso común, consejos de autocuidado, y ejercicio, es una estrategia de tratamiento eficaz para el dolor de espalda agudo y crónico, con o sin dolor en las piernas”.